8 de marzo del 2011
Managua | END
* El experto en derecho internacional, Mauricio Herdocia, considera que la CIJ no concedió a ninguno de los dos Estados en conflicto, lo que cada uno solicitaba, sin embargo, salvaguardó el interés fundamental de Nicaragua en no detener el dragado
Por Jasmina Escobar Sandino | Nacionales
La resolución que emitió esta mañana la Corte Internacional de Justicia, CIJ, respecto al diferendo limítrofe suscitado entre Costa Rica y Nicaragua, luego que este último iniciara labores de dragado en el río San Juan, fue salomónico, balanceado y equilibrado.
Así lo consideró el doctor Mauricio Herdocia, experto en derecho internacional, ya que, la Corte no concedió a ninguno de los dos Estados en conflicto, lo que cada uno solicitaba, sin embargo, salvaguardó el interés fundamental de Nicaragua en no detener el dragado.
“La Corte afirmó, en ese sentido, que no había pruebas, evidencias ni datos suficientes que permitiera deducir que el dragado iba a ocasionar daños inminentes al medio ambiente costarricense”, expresó el especialista.
De igual forma, la máxima entidad jurídica internacional retomó en su fallo lo que Nicaragua había expresado en las audiencias orales, de que no tenía la intensión de estacionar tropas en la zona, en ese sentido, dictó una medida cautelar para que ambas partes, deben evitar mantener personal de las fuerzas armadas o de seguridad pública en el sitio en cuestión.
“Otra medida cautelar que me parece importante, es la relacionada con evitar cualquier tipo de acciones que puedan agravar el conflicto, poniendo una solución al mismo. Esta medida abre las puertas de par en par, para que ambos Estados reinicien sus procesos de negociaciones bilaterales”, consideró Herdocia.
“Creo que el fallo de la Corte ha puesto una escalera para que Costa Rica y Nicaragua se encuentren en la zona, donde deben dirimir sus diferencias bilateralmente. También ha permitido encapsular el diferendo, con estas medidas cautelares a fin de no enturbiar las relaciones entre las dos naciones”, agregó.
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